Diario de un habitante de Badajoz
Ventoso y lluvioso. En la madrugada de este día salieron de la plaza quinientos franceses con la intención de tomar un puente de barcas que los ingleses tenían a una distancia de legua y media de la plaza. En el lugar que llaman Benavides y que estaba defendido por mil quinientos ingleses de infantería y algunos de caballería, éstas tropas les atacaron y cercaron de manera que no volvieron a la plaza más de trescientos sesenta, resultando el resto muertos o prisioneros.
En esta misma mañana salió de la ciudad el presbítero D. José Sanches con seis hombres del pueblo, movido por la caridad, para dar sepultura a los portugueses, que habían sido abandonados desnudos en el camino de Talavera en varias huertas y que había muerto a manos de la caballería francesa que había salido el día 15 a las tres de la tarde.
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